Hace unos días estábamos, la verdá, un poco bajoneados con los números y nos comíamos (ya se que vos no, digo casi todo el resto conmigo incluido) la opereta PRO de que vamos tan tan arriba que no debatimos, no contestamos nada, no gobernamos, (bah hacemos lo de siempre: nada). Pero las cosas parece que empezaron a cambiar.
Todavía no hay un real clima de campaña, pero algunas burbujas van subiendo por las paredes de la olla. J. Aurelio (consultora Aresco) decía ayer que la campaña “colorida” de Macri no estaba dando el resultado esperado. El Jefe de Gobierno estaría estancado, como constipado electoralmente. Y posiblemente –esto hay que medirlo, claro está- en declive.
Por otra parte, Aurelio decía también (aclaro que es insospechable de simpatías con la fórmula K para la Ciudad de BA) que la fórmula que encabeza Filmus había sumado unos 7 puntos en los últimos días. Uno dice ¿el efecto Cristina?, ¿salió sonriendo en una foto? No se, la cuestión es que las preferencias se van polarizando en los dos proyectos que disputan de verdad (esto ya lo dije antes). Desaparece Pino (y el Gobierno no hace nada para parar el desmonte), y desde ya el resto que no pasa del 3% en el mejor de los casos.
Está claro que la elección comienza el 10 y termina el 31, y la campaña también. Mucha gente se plantea la elección en dos vueltas y todo es parte del asunto. Primero votan según su preferencia –y de paso muchos meten los legisladores que creen deben estar- y luego pasan a votar según sus intereses más caros. Otros, desde ya, viven caídos del catre y van a votar porque es obligatorio o porque va el vecino.
Es posible ganar la Ciudad (no recuperarla, porque el Proyecto Nacional que venimos defendiendo nunca gobernó Buenos Aires). Tenemos que pasar la primera vuelta con la menor distancia posible (entre 3 y 5 puntos estaría bien) y luego, salir a buscar los votos de los candidatos que se cayeron. La segunda vuelta es otra elección y tiene otra lógica. Pero nosotros, todavía estamos acá y hay un montón de gente que uno conoce para ir a conversar (¿qué seguís leyendo? ¡andá ya y trae ese voto!).
Edelmiro F.